El
juego es sencillo, un camuflaje sin mucho esfuerzo, un delantal blanco recién
lavado para ocultar los regueros partidistas que desde hace tiempo destiñen y
manchan. El delantal está marcado como Grupo Significativo de Ciudadanos y
sirve para que los políticos de oficio se presenten como políticos de ocasión
por medio de un arrume de planillas firmadas. Cambian entonces el logo del
partido o los partidos, que pasan a ser unos avisos en la espalda, por el calificativo
de independientes o alternativos.
Antioquia
tuvo el mayor número de candidatos por firmas en las pasadas elecciones de
octubre. Pero en Colombia los candidatos vergonzantes de sus orígenes políticos
has venido creciendo. El año pasado se inscribieron 91 aspirantes por firmas
para alcaldías de capitales y gobernaciones. Casi dos terceras partes de ellos
terminaron en alianzas con partidos tradicionales. Y desde 2011 hasta 2019 el
crecimiento de este tipo de candidaturas alcanzó el 488%.
Los
ganadores en alcaldía de Medellín y gobernación de Antioquia se presentaron con
firmas aunque tenían detrás sonoras coaliciones partidistas. En el caso de
Aníbal Gaviria era más una estrategia para acomodar un variopinto tropel de
partidos sin mostrar una preferencia marcada. Era imposible para Gaviria ser
independiente luego de haber participado con bandera roja en múltiples elecciones
y cargos públicos. Para Daniel Quintero, en cambio, fue un parapeto perfecto en
una ciudad que abandona cada vez más el voto amarrado y en un ambiente que
alentaba a votar independiente. Quintero ha hecho toda su carrera al lado de
partidos y políticos variados. Fue candidato al concejo de Medellín por el
partido conservador en el 2007. Luego impulsó la candidatura de su hermano a la
misma corporación en 2011 por el Partido Verde apoyando a la dupla Aníbal
Gaviria y Sergio Fajardo. Más tarde aspiró a la Cámara en Bogotá por el partido
Liberal y terminó trabajando en el gobierno de Juan Manuel Santos. Algunos
dicen que en todo el recorrido también tocó las puertas de Cambio Radical y La
U.
Ahora,
la designación de algunos miembros de su gabinete muestra filiaciones,
coaliciones y obligaciones del candidato independiente y el alcalde de
partidos. Esas relaciones no descalifican a los recién nombrados, por supuesto,
pero sí dejan claro que hubo firmas de la política pura y dura más allá de las
planillas. Una corta lista a mano alzada.
Empecemos
por la secretaria de Infraestructura, Natalia Urrego Arias, hermana de la
esposa de León Mario Bedoya, ex alcalde de Itagüí con el respaldo del senador
conservador Carlos Andrés Trujillo. Ese grupo completará 12 años de reinado en
el municipio y con apoyo de liberales y Cambio Radical han ganado las alcaldías
con cerca del 50% de los votos.
El
secretario de hacienda, Óscar de Jesús Hurtado, ha sido dos veces representante
a la cámara por el partido Liberal. Lleva 16 años dedicado al juego electoral
con 4 candidaturas consecutivas a la cámara por Antioquia, dos quemadas y dos
periodos. Apoyó a Humberto de la Calle en la primera vuelta y a Gustavo Petro
en la segunda.
Alejandro
Arias García, el secretario de gestión territorial, fue candidato quemado al
Concejo en el 2012 de la mano de Gabriel Jaime Rico y fue coordinador de su equipo
universitario hace unos años. Rico vuelve por interpuesta persona a La
Alpujarra, su Plaza Mayor.
El
candidato de Daniel Quintero al Área Metropolitana, tal vez el segundo cargo más
importante en el Valle de Aburrá, es Juan David Palacio. Un joven cuya gran
experiencia pública es haber sido secretario del Concejo de Medellín a los 25
años impulsado por el entonces concejal Miguel Quintero, hermano del actual
alcalde. Antes había gerenciado Transportes La Estrella. Juan David es hijo del
político Conservador Oscar Iván Palacio, curtido en las lides de la burocracia
y los directorios donde ha trabajado con Andrés Pastrana, Álvaro Uribe. Pedro
Juan Moreno, Jorge Hernández…
La
secretaria de salud, Jennifer Andree Uribe, trabajó en la Unidad de Apoyo del
concejal Miguel Quintero y en el ministerio de las TIC con el actual alcalde
cando era viceministro. Ha sido cercana a los procesos políticos en el
municipio de La Estrella. La política partidista del actual alcalde tiene
buenas rachas desde los municipios del sur del Valle de Aburrá.
La
directora del Inder, Diana Paola Toro, tiene el perfil para el cargo, y tiene
además la recomendación de Jhony Jaramillo quién ha trabajado con los
liberales, fue gerente de la campaña del Centro Democrático al Concejo de
Medellín en 2015 y candidato a la Cámara quemado por el partido de la U en
2018.
Veremos
pues algunos enfrentamientos de visiones e intereses en un gabinete con peso político
en las posiciones con más presupuesto e influencia, y con un intento de balance
independiente en secretarías con grandes expectativas en sectores alternativos.
Las tensiones de siempre entre una parte de los votos y unas líneas del
discurso.
Yo espeeo que al tipo le vaya bien, pero me generó desconfianza desde el pruncipio. A mi los mentirosos y los que niegan lo que fueron o hicieron me generan muchisima desconfiaza. A diez ojos con "muñeco e' palo".
ResponderEliminarDe acuerdo con usted, en relación con lo de "mentiroso". Es el rey de las mentiras, Pinturita.
EliminarSiempre en la Politica estamos con una mirada crítica y juzgando a las personas... Que bueno analizar las propuestas, el programa de gobierno y posterior plan de desarrollo de Daniel Quintero, Anibal Gaviria y otros que no quisieron tener el aval de un partido político... Tenemos que avanzar.. Ningún gobernante lidera solo y siempre tendrá que hacer coaliciones con líderes y partidos políticos....
ResponderEliminarMi llamado es a evaluar objetivamente la gestión de un mandatario antes de juzgarlo por su pasado político...
Quintero no es transparente en lo que dice y hace...vale llevar gente de confianza pero en puestos claves debió primar la meritocracia y la escogencia según una selección más objetiva...deseo lo mejor para Medellín y un gobernante dónde prime el bien común
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. La meritocracia no existe en la administración de Pinturita.
EliminarEn el caso del Inder... Lo preocupante es que el Señor Jaramillo a parte de poner la directora, que no tiene idea de lo público ni de Medellín porque es de Envigado, se autoproclama ADMINISTESDOR DEL ESTADIO....
ResponderEliminarY Quintero ahí.. Sano?
Muy cierto. La gente que no es de Medellín, qué va a saber manejar ese instituto.
EliminarPascual,en tu articulo falta decir que la secretaria de educación, Martha Alexandra Agudelo es sobrina y recomendada del senador liberal Iván Darío Agudelo
ResponderEliminarEsta secretaría de educación perteneció todo el tiempo a la Administracion de FICO por prestacion de servicios en el vivero del software
EliminarPura rosca y poco capacitados para esos cargos.
EliminarEsto es lo peor que tienen que decir del gabinete de Quintero? Entonces estamos muy bien!
ResponderEliminarBien???
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