martes, 2 de noviembre de 2010

Las soledades americanas




En julio de 1831 Alexis de Tocqueville y Gustave de Beaumont, su colega y compañero de aventuras, estaban en plena cabalgata por los desolados bosques cercanos a los Grandes Lagos en Estados Unidos. El par de Quijotes franceses, que mencionan los descuidos de Sancho en medio de sus jornadas, van en busca de la vida salvaje, del mundo recién creado, de las estampas de la naturaleza en estado puro. Su mirada sobre los escasos hombres blancos que pueblan esas lejanías es menos delicada que la que le entregan a los grandes árboles, a los indios y a la silueta esquiva de los animales. Los emigrantes son parte de un experimento que los viajeros miran con algo de curiosidad y admiración, con una lupa compasiva y unas pinzas con su toque de crueldad. Lo más importante es ver “la cuna todavía vacía de una gran nación”.
Quince días en las soledades americanas es un pequeño libro de viaje, un anecdotario si se quiere. No tiene la carga de reflexiones de La democracia en América y está escrito desde el deslumbramiento más que desde el pensamiento. Sin embargo, para Tocqueville es imposible no hacer algunos apuntes sobre la manera de actuar de los rudos colonizadores con sus casas hechas de troncos recién cortados, todavía luciendo retoños en las ventanas. Viendo el alboroto extremista del que se ha hablado últimamente en la política norteamericana, es imposible no pensar que las multitudes que protestan hoy desde la variopinta franquicia del Tea Party, tienen algo de los habitantes de las soledades de Búfalo, Detroit, Boston en la primera mitad del Siglo XIX.
En esas cabañas, en ese “país del demonio en el que usan osos como perros guardianes”, la religiosidad aparece como una obligación desmesurada. Con el verano llegan los pastores metodistas y los colonos se reúnen al aire libre en misas campales de tres días: “Es digno de ver con qué ardor se dedican estos hombres a la oración, con qué recogimiento escuchan la solemne palabra del predicador. En el desierto uno se torna hambriento de religiosidad”. Son las palabras de uno de los hospederos de Tocqueville. Las actitudes de los variados fanáticos religiosos que gritan por estos días confirman que muchos descendientes de los pioneros quisieran mantener un oso en la puerta de sus garajes para alejar a los impíos.
En otra conversación se puede advertir la diferencia entre los habitantes de las grandes ciudades en las costas y quienes se arriesgaron a internarse en los destierros del interior. Tocqueville se extraña de no haberse topado con un solo europeo en su travesía y pregunta dónde están los hombres que supuestamente se encargan de poblar a América. Su interlocutor le responde con una mezcla de desprecio y orgullo: “Solo los americanos tienen el coraje de arrostrar tales miserias y pagar semejante precio para alcanzar la prosperidad. El emigrante europeo se queda en las grandes ciudades de la costa o en los distritos cercanos. Allí se convierte en artesano, gañán o criado. Solo al americano le corresponde la tierra. Es a él a quien la ha sido concedido el adueñarse de las tierras del Nuevo Mundo, someterlas al hombre y crearse así un inmenso porvenir.”
Ese inmenso porvenir es el que ven amenazado muchos de los ultramontanos gringos por parte de un Estado que supuestamente quiere enseñarles costumbres ajenas con dinero ajeno. Sienten que construyeron su mundo lejos del Estado central y que no es momento para entregarlo. “Nación de conquistadores que solo aprecia de la civilización y de las luces su utilidad para alcanzar el bienestar…gente que como todos los grandes pueblos, persigue una sola idea y avanza hacia la adquisición de la riqueza, único fin de sus fatigas…”

20 comentarios:

Pascual Gaviria dijo...

Los paisajes que acompañan el texto son de Asher B. Durand
Lo descubrí buscando imágenes de Estados Unidos en el siglo XIX y creo que tienen el mismo aire maravillado de las escenas que describe Tocqueville. Asher B. Durand fue el creador de una corriente de paisajistas llamada Escuela del río Hudson. Y una de sus travesías más famosas como pintor al natural la hizo por los montes Adirondack, al noreste del Estado de Nueva York, región por la que según creo también caminó Tocqueville.

Pascual Gaviria dijo...

Sobre la cita de Álvaro Gómez. No solamente la puse por que coincide en parte con la visión que tengo sobre la guerra contra las drogas y el camino que debería tomar Colombia. Me impresionó que fueran declaraciones de 1976. Una época en la que el problema de la violencia del narcotráfico todavía no asomaba. Siempre se ha repetido que el primer político en hablar del tema fue Ernesto Samper como presidente de la Anif en 1979. Esto dijo Samper en su momento: "Cuando en 1979, en tanto presidente de la ANIF, y de nuevo en 80 y 81 Samper decía "el país debe estudiar la legalización de la marihuana... Legalización no consiste en dejar la marihuana al garete... sino enmarcar su cultivo, comercio y consumo dentro de las leyes y normas que rigen nuestra economía, nuestra sociedad y nuestro Estado. Proponer dicha legalización unilateralmente, sin contar con los Estados Unidos, sería poco menos que una bravuconada de chiquillo caprichoso...". En 1981 afirmó "si Colombia no legaliza la marihuana, la economía nacional se verá erosionada y desestabilizada, se consolidará la impunidad de las mafias de traficantes...". "

Entonces me sorprendió la declaración de Gómez Hurtado unos años antes. Eso sí, no soy del Movimiento de Salvación Nacional como según parece es Juka. Creo que Gómez Hurtado era un hombre inteligente y no tengo problema en citar y apoyar las opiniones sobre un tema particular de un personaje con el que en la mayoría de los temas estaría en desacuerdo.
Con decirle que en el tema de las drogas y libertad individual estoy de acuerdo con Roy Barreras.

Pascual Gaviria dijo...

Vargas Llosa sobre el Tea Party hace una semana.

Las caras del Tea Party

Pascual Gaviria dijo...

Un análisis antes de las elecciones.

Estados republicanos, ciudades demócratas

Pascual Gaviria dijo...

Francisco E. Thoumi, tal vez el colombiano que más sabe sobre el tema de la guerra contra las drogas, es pesimista sobre el impacto que pudiera tener la Proposición 19.

A esta hora 11:05 del martes en Colombia parece que la proposición se hundirá por un margen mayor al que pronosticaban las encuestas. 57% - 43% escrutado el 3% de los votos que ya es un número importante: cerca de 400.000

Este es el argumento más importante de Thoumi. Me parece que tiene razón:
"El uso legal de drogas que alteran el ánimo depende de la domesticación social de cada droga. El alcohol y el tabaco están domesticados en la sociedad occidental, es decir que en esta hay controles sociales establecidos que permiten y toleran su uso. En California, la meca del movimiento hippy de los años sesenta y cuna de cambios sociales como la aceptación de la homosexualidad, puede afirmarse que el uso de la marihuana es aceptado socialmente por un grupo grande de ciudadanos.

Esto no ocurre con drogas consideradas como duras: cocaína, anfetaminas, heroína, cuyos usuarios son vistos por la mayoría de los americanos como miembros de una contra-cultura que debe neutralizarse. Una cosa es que en un Estado considerado progresista se apruebe el uso de la marihuana, una droga "suave" y la droga ilegal de mayor consumo en los Estados Unidos, y otra aceptar el uso recreativo de drogas consideradas fuertes, nocivas y anti-americanas por la mayoría de la población."

La marihuana, California y el debate mundial sobre la droga

Pascual Gaviria dijo...

Ana María, gracias por sus comentarios. Me alegra que le guste la página. Puede ponerla en su directorio, no hay problema. Sólo una pregunta: cuál es su página.

Pascual Gaviria dijo...

Dice el corresponsal, en tono de pregunta, que por qué le dicen al grupo de jugadores del Deportivo Independiente Medellín los mineros chilenos. Y responde él mismo, en tono de burla, que porque los sacaron dos meses antes.

Anónimo dijo...

despues de ese comentario creo que he llegado a la ultima hoja para escribir en este blog..

Gajaka dijo...

Cuál es el problema con la mariguana, el crimen organizado? Pues vamos a acabar con el, puesto, OJO, que es diferente al terrorismo. Si se aprueba su uso por el Estado, habran algunas formulas para su venta y prevencion.
Sicologos y voluntarias para los que se iniciaran y sicoanalistas para los que solo le sacan provecho con el crimen, ah, pero los que se dedican a escribir como este corresponsal del blog, bendita sea, ahi estaremos para ayudar, y no como cierta personita que escribe por aqui, que la rechaza asi por asi, O porque alguna vez la fumó y le dio la palida.
El cuento de la señora de 85 años y su nieto, que le salvo la vida con un ploom, fue la que me inspiro escribirles y seguir con este asunto hasta el 2059, que sera el año de mas luz en 12000 años.

Juan Carlos Orrego dijo...

Pascual: ¿quién quita que al Medallo no le dirán también "minero chileno" porque vio la luz cuando menos pensaba? Lástima que haya muerto el pulpo Paul: ya mismo le remitiríamos la duda sobre la milagrosa clasificación del "Milancito".

Pascual Gaviria dijo...

Las noticias en México hacen que el tema de California no pase al olvido tan pronto. La marihuana sigue siendo una de las principales fuentes de ingreso de los narcos mexicanos. Hoy fue descubierto un túnel de 600 metros para pasar la hierba que el 46% de los norteamericanos considera debería ser legal. Según una encuesta el promedio de aprobación nacional de la legalización está 3 puntos por encima del resultado en California.
Otro dato impresionante: este año la guerra contra las drogas en México ha dejado más muertos (10.035) que los registrados durante el gobierno de Vicente Fox (2000-2006).

Pascual Gaviria dijo...

Aquí está el enlace con la noticia.

Túnel para pasar marihuana entre México y USA

Lucas Armando Jaramillo dijo...

Cuento y hechos
Estabamos todos como idiotizados por las bajas ventas en la empresa donde trabajo aqui en Medellín, con la puerta abierta para que nos fueramos antes de quedar expulsados oficialmente por el patrón, que ya nos tenia inquina a la mayoria por ineptos, pues las ventas y los productos quedaban mal hechos por el cansancio y la falta de estimulos.
Asi que, como yo era el empleado de mas confianza con el boss, resolvi darle una salida al problema de tipo sicoanalitico, digamos asi, invitandolos por grupos a fumar marihuana prensada, que es la que mejor se apoya con el cuerpo sufriente.
Me reunia con ellos el fin de semana en diferentes casitas, unas en la ciudad y otras en el campo.
Estaban felices, ya que a nadier le cayó mal, y asi logrando evitar la palida, todos, unos 28 para el experimento, salieron avanti, y prometieron hacerlo los fines de semana para descansar, oir musica y sexo, y asi los lunes, y de esto ya van dos meses, empezo a mejorar la calidad de la produccion, y el jefe esta contento por la recreacion que dice es buena para los obreros, pero lo que el no sabe es que ser hizo con marihuana prensada, y que ahora hablan mas, y escuchan mejor musica. Osea que no solo para los estudiantes es la oportunidad.
Ellos solo tomaban aguardiente y fumaban cigarrillo Premier, que es lo peor del tabaco, ahora son pilosos y las ventas y las comisiones subieron, somos una empresa feliz por el momento antes de que empiece la imperfeccion humana.

Garrincha dijo...

Gol de Racing de Avellaneda!!!!

Pascual Gaviria dijo...

Para no dejar olvidado a Tocqueville apenas pasada una semana, pegaré otros dos o tres citas del libro que me parecen interesantes.

Tocqueville tenía según parece una fuerte prevención con el excesivo materialismo norteamericano, todo el tiempo está elogiando el valor de los colonos al mismo tiempo que reprocha sus cálculos y sus deficiencias intelectuales:

“El emigrante de Estados Unidos no aprecia la victoria más que por sus resultados; considera que la gloria es un ruido vano y que el hombre no viene al mundo más que para adquirir la prosperidad y las comodidades de la vida. Sin embargo, es valiente, aunque valiente por cálculo, valiente porque ha descubierto que hay cosas mucho más duras de soportar que la propia muerte. Aventurero rodeado de su familia, extrae sin embargo escaso gusto de los placeres intelectuales y de los encantos de la vida social.”

Una más sobre los habitantes de Detroit, una ciudad de 2000 o 3000 habitantes.

“Atravesar selvas prácticamente impenetrables, cruzar ríos profundos, desafiar ciénagas pestilentes, dormir expuestos a la humedad del bosque, son los peligros que arrostra el americano cuando de lo que se trata es de ganar dinero, pero que alguien haga cosas parejas por mera curiosidad es algo que sobrepasa su comprensión. Añádase a ello que el hombre del desierto no tiene ojos más que para las obras humanas; por ello gustoso os enviará a visitar una carretera, un puente o un bonito pueblo, pero que uno le conceda valor a los grandes árboles y a las soledades es algo que no le cabe en la cabeza”

Pascual Gaviria dijo...

Otra de las cosas que sorprende del libro es el alma de naturalista de Tocqueville que lo hace decir cosas muy parecidas a las de los ecologistas del siglo XXI.
“El hombre se acostumbra a todo. A la muerte en el campo de batalla, en los hospitales, a matar y a sufrir. Se acostumbra a cualquier tipo de espectáculo: un pueblo antiguo, el primero y legítimo dueño del continente americano, se va fundiendo día a día como la nieve bajo los rayos del sol y desaparece de la faz de la tierra a ojos vista, mientras que, en ese mismo lugar y ocupando su sitio, otra raza crece todavía con mayor rapidez. Es ésta última la que destruye los bosques y deseca los pantanos, mientras lagos semejantes a mares y ríos inmensos se oponen en vano a su marcha triunfal. De año en año las soledades se transforman en pueblos y los pueblos en ciudades. Testigo cotidiano de semejantes maravillas, el americano no ve en todo ello nada de extraordinario. Considera esta increíble destrucción y este crecimiento más impresionante si cabe como parte del curso natural de las cosas y a ello se acostumbra como si del orden inmutable de la naturaleza se tratara.”

Una más del Tocqueville ecológico:
“Al recorrer estas soledades floridas, donde, como en El Paraíso de Milton, todo parece preparado para acoger al hombre, uno siente una admiración tranquila, una dulce y melancólica emoción, un vago desagrado por la vida civilizada, una suerte de instinto salvaje que le hace pensar con pesadumbre en que esta deliciosa soledad pronto será turbada. De hecho, la raza blanca avanza ya a través de los bosques que la rodean y en pocos años el europeo habrá cortado los árboles que se reflejen en las límpidas aguas del lago y forzado a los animales que habitan sus orillas a retirarse a desiertos aún más lejanos.”

Pascual Gaviria dijo...

Una respuesta de Felipe González sobre el poder en las oficinas públicas. Sirve para pensar en todo nuestro escándalo del DAS:

"-¿Nunca ha pensando en escribir una autobiografía?

-He resistido la tentación. Las memorias políticas suelen ser un ejercicio de exculpación de uno mismo y de culpabilización de los otros. Y también hay cosas que no puedes contar. En las luchas de poder las relaciones son subterráneas: las cuatro quintas partes, como en el iceberg, no se ven. Hay excepciones como la del Vaticano, donde todo es subterráneo. Cuando piensas, por ejemplo, en la cantidad de gente que había implicada en el 23-F y cómo hubo que manejar aquello... Ponte en la piel de Obama, con el aparato de seguridad que recibió de Bush... Ese hombre creía que podía resolver Guantánamo en 10 meses. Desde fuera diríamos que no ha cumplido. El asunto es que le va a costar toda la legislatura recuperar el control de los servicios de seguridad como él los querría. Ha habido demasiados vuelos clandestinos, demasiadas cárceles secretas y muchas de las personas que estuvieron en eso forman parte ahora de sus servicios de inteligencia. Incluso en las democracias más consolidadas ha habido siempre una lucha subterránea entre el poder civil y el militar, o el de los servicios."

Graves dijo...

Excelente articulo, como siempre su labor de critico le asienta muy bien en completa evolucion de imagen y conciencia, muy distinto a la ideologia; eso dejemoselos a los sociologos.
Que cosa eso de la riqueza que inventaron los conquistadores con la colonias americanas. No creo que los franceses fueran tan testarudos como los de extremadura y Aragon.
He escrito un libro que se llama "No perdonan", sobre los habitos de nuestros paisas godos-uribistas.

Pequeño Hereje dijo...

Buen artículo y buena página.

Saludos.

Osvaldo dijo...

Me interesa mucho el articulo y la verdad te felicito. En mi apartamento en buenos aires me la paso mucho tiempo leyendo diversas historias que encuentro por internet y me instruyo en distintos temas