martes, 6 de marzo de 2012

La cartera de Cultura





Alguna particularidad debe tener el ministerio de cultura para que los últimos tres presidentes hayan encargado exclusivamente a mujeres de los retos de ese armazón tan prestigioso como frágil. Muchos dirán que seis ministras consecutivas son solo un reflejo del importante papel de las mujeres en el tras escena de las empresas culturales. Pero la intuición masculina me dice que la seguidilla de doce años a cargo de señoras demuestra sobretodo el hallazgo de un comodín para cumplir obligaciones de género.
Por allí han pasado, con altas y bajas, galeristas estilizadas, matronas folkloristas, damas de sociedad y ornato, políticas de cuna y carisma, tecnócratas con beca en administración y gestoras con idea y recorrido. Y por momentos uno entiende la frase de cajón según la cual la cultura es la Cenicienta del gabinete. Cada vez, a pesar de los conciertos y los saltimbanquis de las ferias, el ministerio es más silencioso e irrelevante. Está bien que cuidar bibliotecas y apoyar planes de lectura es un trabajo que se debe hacer sin ruido, pero el ministerio de cultura está corriendo el riesgo de convertirse en una agencia gubernamental para pedir recursos foráneos, filar comparsas y buscar la aprobación de leyes que libren de impuestos a algunos sectores.
Las feministas deberían pensarlo bien y exigir que les asignen definitivamente una cartera con más billetes y menos obligación a la compostura política y las frases alusivas a la diversidad. Leí sin detenimiento las memorias que dejó la ministra Paula Moreno y la verdad se nota que le gusta el trabajo y es seria. Pero luego de casi tres años no pudo dejar mucho más que informes sobre cómo se deben hacer las cosas. Quedó una relación de los temas que el ministerio abordó durante sus primeros diez años y entregó lo que la burocracia llama una hoja de ruta. Se definió el perfil de los directivos y se localizaron las posibles alianzas con las regiones y los privados. Mejor dicho, hay ministerio de estrategias culturales pero no hay como salir del organigrama.
La ministra Moreno también exhibió con orgullo su principal ejecución de puertas para afuera. El Gran Concierto Nacional que tuvo tres versiones multitudinarias, conmovedoras en las fotos, que reunieron niños y jóvenes de todas las regiones del país pertenecientes a las escuelas de música. Para el 2011 no hubo gran concierto en todo el país sino un pequeño toque en el Palacio de los Deportes en Bogotá. Dicen que fue el invierno. De modo que lo único que quedó de la ministra Moreno, exitosa según la voz de muchos, fue un manual de funciones, un proyecto que no sobrevivió un año sin su presencia y tres leyes archivadas en la biblioteca del Congreso.
Moreno hizo lo que pudo. Cuando un ministro tiene un presupuesto de menos de 100.000 millones de pesos al año para impulsar la cultura y construir programas, no le queda más que impulsar leyes y diseñar programas. Con la ministra Mariana Garcés el presupuesto ha llegado hasta los 194.000 millones de pesos. Más de la mitad de la plata se va en gastos de funcionamiento y en una sola hoja quedan las inversiones de todo el año, muchas de ellas en mantenimiento de edificios patrimoniales. Por supuesto la ministra Garcés está dedicada a impulsar leyes. Para hacer una pequeña comparación vale la pena decir que la secretaría de cultura de Medellín tuvo en 2011 un presupuesto cercano a los 60.000 millones de pesos. Cuando se creó el ministerio de cultura muchos hablaron del riesgo de que se convirtiera en un adorno, y resultó peor: un adorno barato.

7 comentarios:

Unknown dijo...

El panorama en Medellín sería mas lúgubre si hubiera ganado el frívolo candidato de las elecciones pasadas, de todas formas es preocupante el futuro recorte en el presupuesto destinado para cultura.

Recursos de la FLA que no patricinaron la pasada temporada taurina podrán usarse para escuelas de música, fiestas del libro, conciertos y otras actividades. :]

Nerön Navarrete dijo...

Timorato, el problema es que esos recursos de la FLA deberían ser para cultura de la gobernación, porque en general Antioquia en ese campo está muy descuidada. Yo creo que no hay un sólo programa a nivel departamental que haga intercambios entre subregiones. El reto es para la secretaría de cultura, pa que haga lo mismo con menos plata. O sea, fijo le van a bajar a los proyectos grandes como la Fiesta que es más bien costosa, y tendrán que echarle ojo a la plata que se pierde en las comunas por cuentas del PP y esos programas de formación artística. Lo peor es que hay cosas que no sólo tienen que seguir, sino que se tienen que ampliar porque la ciudad así lo pide, como salas abiertas o las becas. Y con menos plata...

Nerön Navarrete dijo...

Pascual vos que sabés más de eso... Tengo la teoría de que la reducción en el presupuesto de cultura de la ciudad pudo venir de arriba, porque todos escuchamos en su momento que la cultura en Medellín tenía más plata que el ministerio. No sé, ¿muy osado tener esa sospecha?

Pascual Gaviria dijo...

El Timorato, Neron.

La secretaría de cultura de Medellín no tuvo más plata que el ministerio pero sí estaban muy cerca. Hasta el año pasado el ministerio tenía menos de 100.000 de pesos, en 2008 tenía algo más de 70.000 millones frente a los 60.000 de la secretaría en Medellín. Lo triste es que cerca del 70 % de la plata del ministerio se va en pagar la nómina y restaurar edificios. Hacía más Colcultura en su momento.

Con respecto a la reducción en Medellín se ha dicho por parte de la administración de Gaviria que se intentará mantener la cifra del año pasado. En principio el recorte sería de 20.000 millones pero dicen que los buscarán sobre la marcha durante el año con excedentes de EPM.

Lo que pasó fue que en la administración pasada no se comprometió el mismo presupuesto para la cultura -algunos dicen que por darle posibilidades de decisión a Gaviria y otros dicen que fue falta de gestión Usuga el antiguo secretario- y ahora se tienen que hacer maromas para encontrar los 20.000 no presupuestados. Sería muy triste que se recortara 30% de los recursos de cultura mientras los gastos de funcionamiento crecen 4%. Hay que estar pendientes para que el gobierno municipal no termine diciendo: no, no se pudo, el próximo año les ponemos de nuevo los apoyos.

Pascual Gaviria dijo...

Becas y estímulos para 2012. No me digan que esto no se oye muy pobre para un MINISTERIO:

"También hay nuevas oportunidades que beneficiarán a los artistas que cursan estudios en el exterior. El Programa Nacional de Estímulos otorgará dos becas de manutención a estudiantes colombianos que estén cursando algún proceso de educación formal en el exterior en una universidad o centro educativo debidamente certificado, dentro de las áreas artísticas convocadas, en pregrado o posgrado."

eureka dijo...

jeje, si se oye muy pobre, parece un anuncio de una fundación de beneficiencia. Pero la cosa también implica ver en qué se comprometen los exiguos recursos que hay.

Otra cosa es que privados le pueden estar metiendo el diente al apoyo cultural por su cuenta, por ejemplo RCN y cine (aunque los resultados son en general de dudosa calidad), los festivales de cine tienen su propia administración. Si sjumáramos eso, cuanto se gastaría en cultura??

Luis Miguel Usuga dijo...

Estimado Pascual: En 2011 el presupuesto de la Secretaría de Cultura de Medellín eran 91 mil millones de pesos y si era superior al del Ministerio.